Inicialmente debemos saber que es parte fundamental de los sistemas de seguridad del vehículo, enmarcado en la Seguridad Vial, esta se divide en tres diferentes grupos: Activa, Pasiva y Post-accidente. La primera busca evitar el surgimiento de un accidente, en la que el sistema de frenos es parte fundamental.

El sistema de frenos convencional de un automóvil se conforma por una serie de elementos que interactúan entre sí para lograr que el vehículo se detenga, la parte del sistema de frenos donde se inicia la acción de frenada acorde a los requerimientos del conductor es en el pedal, el cual recibe la fuerza ejercida por el conductor y la entrega multiplicada al booster o servofreno el cual también multiplica la fuerza recibida y la entrega a la bomba de frenos, ya en la bomba de frenos se convierte en presión hidráulica y se traslada hacia las ruedas de forma eficiente y sin pérdidas, aprovechando así todas las propiedades de los líquidos como la incompresibilidad y otras ampliamente definidas por Pascal (1650), de una forma instantánea a los cilindros y pistones receptores donde esta presión multiplicada se convierte en fuerza mecánica que empuja las pastillas contra el disco y las bandas contra la campana para que finalmente a través de la fricción se detengan las ruedas.

En resumen, el sistema de frenos se puede definir como un conjunto de palancas mecánicas, hidráulicas y de vacío que multiplican la fuerza ejercida en el pedal 25 o más veces para lograr detener el vehículo.

Lo expuesto anteriormente hace referencia a lo que ocurre al interior del vehículo, pero hay que resaltar que la acción de frenar un automotor también se ve afectada por otros factores como los ambientales, pues la altura sobre el nivel del mar incide en la generación de vacío en el servo freno y el punto de ebullición del líquido, así mismo, en los países con estaciones se requiere que elementos particulares para que el líquido no se congele en invierno y los demás elementos mencionados se comporten de manera adecuada al cumplir su función en esas condiciones, sin restar importancia a demás factores ambientales como el salitre para ciudades costeras, el ozono, la lluvia, entre otros.

Otra parte fundamental del sistema recae en la fricción, es el producto del rozamiento entre pastillas-discos o Bandas-Tambores, durante este proceso se trasforma energía cinética en energía calorífica y acústica. Esta energía, por definición depende de la velocidad y el peso del vehículo, de tal forma que a grandes velocidades y pesos, la cantidad de energía transformada en calor es supremamente alta, haciendo que el sistema de frenos esté sometido a temperaturas superiores a los 300° Celsius y más, por ello todos los componentes deben ser cuidadosamente diseñados y fabricados para soportar estas temperaturas sin afectar ni su desempeño ni su respuesta a los demás esfuerzos mecánicos que se exigen del sistema para lograr detener el vehículo en el menor tiempo posible sin perder el control, algunos de estos elementos son los discos, las pastillas, y las otras partes del sistema (Hardware), partes de caucho y particularmente el líquido de frenos.

Por todo lo anterior, es importante resaltar las propiedades que debe tener el líquido de frenos, pues este no solamente conduce la fuerza del pedal a las ruedas, sino que debe ser capaz de resistir altas y bajas temperaturas (tener un punto de ebullición alto y un punto de congelación bajo) ser auto lubricante, dar tratamiento adecuado a la humedad del ambiente (higroscópico)

no afectar las partes de caucho de los sellos interiores de los cilindros, dar manejo adecuado a la corrosión (PH neutro – ni alcalino ni ácido), y todo esto sin descuidar su capacidad estable de fluir sin restricciones de temperatura (viscosidad cinemática) por conductos muy pequeños como los son los agujeros de retorno de la bomba y las mismas válvulas de admisión y descarga de los sistemas electrónicos como el ABS, según la configuración de cada vehículo y con lo anterior lograr transmitir la fuerza de forma eficiente en fracciones de segundo.

A nivel mundial existen normas para garantizar la calidad de los líquidos de freno, tales como la ISO4925, SAEJ1703-1705, NTC1721, FMVSS116. JISK 2233 entre otras donde se definen en detalle todos los atributos ya mencionados y otros como la fluidez, puntos de ebullición seco y húmedo, estabilidad química, tolerancia al agua, porcentaje de humedad seguro, evaporación y demás que deben cumplir obligatoriamente los líquidos para garantizar un uso seguro. Así como en otros países, en Colombia algunas partes de freno dentro de las que está el líquido de frenos, deben cumplir obligatoriamente con lo dispuesto en la resolución 4983 de 13 de diciembre de 2011 para su fabricación y/o importación y posterior comercialización.

En resumen, cada parte del sistema de frenos es fundamental por ello su rigurosidad en el mantenimiento y la calidad en los repuestos debe ser optima, acorde a cada vehículo, un excelente líquido de frenos es indispensable para el funcionamiento seguro y correcto del sistema del vehículo, los usuarios deben exigir la revisión del líquido y exigir su cambio total, los técnicos reconocen la importancia del funcionamiento integral y por ello en un buen servicio no se limitan el mantenimiento de frenos en las ruedas (pastillas-discos y bandas-tambores) resaltan la necesidad de la revisión del líquido y por ende, al cambio total cada 6, 12 o 18 meses dependiendo su estado, y también brindan información al usuario del tipo de líquido utilizado (DOT-3-4- 5-5.1) y el tipo de uso que se da al vehículo.

La seguridad vial, así como el correcto estado de los elementos de seguridad, son responsabilidad del dueño del vehículo y para ellos cuenta con establecimientos (talleres) especializados en frenos que prestan el servicio a estos elementos para su vehículo e información fundamental como la frecuencia de recambio del líquido de frenos, esta se hace indispensable debido a la absorción de humedad y a la degradación que se da por el uso y demás factores ambientales.

• Para los usuarios, se recomienda que cada vez que se adquiera un vehículo, realizar el cambio total de líquido, para a partir de allí, contar con el líquido adecuado a utilizar y la frecuencia de recambio acorde con el tipo de uso que va a realizar y las condiciones ambientales correspondientes, así como una revisión al sistema de frenos como mínimo una vez al año solo en centros especializados en frenos, poniendo especial interés en el estado del líquido.

• Para los talleres donde se realiza mantenimiento al sistema de frenos, se recomienda contar con al menos un dispositivo para medir el porcentaje de humedad presente en el líquido, y otro para determinar el punto de ebullición, y así establecer las características reales de un líquido, pues la buena apariencia, nivel y olor no son garantías de su correcto estado.

De igual forma, los técnicos que hacen mantenimiento al sistema de frenos deben saber en detalle las especificaciones que deben tener los líquidos para poder asesorar de manera adecuada a sus clientes, teniendo en cuenta el vehículo que tienen, la configuración del sistema de frenos del mismo (con/sin ABS, ESP, entre otros), el tipo de uso que le dan y las condiciones del medio ambiente donde transitan.

El buen funcionamiento del vehículo obedece al comportamiento del usuario quien hace cambios periódicos del líquido de frenos, buscamos con este artículo mejorar el nivel de consciencia en la importancia que representa el líquido de frenos, sus características y lo ideal es apoyarse en su técnico de confianza quien le explica el significado de la sigla DOT, las diferencias entre líquidos a base de alcohol y los siliconados y cómo identificarlos, conocen las diferencias entre DOT3, DOT4, DOT5, DOT5.1, entre otros, entregando esa seguridad del servicio y confianza al usuario, los técnicos saben cuáles son compatibles entre sí, también conocen otros aspectos que les permiten identificar en el mercado las marcas que ofrecen líquidos con mejores especificaciones y su comportamiento, características que tenemos en cuenta en Brake Pak como:

• Punto de ebullición Seco

• Punto de Ebullición Húmedo

• Duración del líquido

• Sistemas a los que aplica (Convencionales, ABS, ESP, otros.)

• Envases plásticos vs metálicos y cómo incide esto en el líquido

• PH y otras propiedades del líquido o la marca.

En conclusión, resaltando la existencia de reglamentos técnicos y requisitos legales para la comercialización y los objetivos que buscan, se hace prioritario para los técnicos conocer tanto las especificaciones que deben tener los líquidos de frenos cómo la oferta de valor de las diferentes marcas de líquido que hay en el mercado en los aspectos arriba mencionados.

Estas buenas prácticas en el mantenimiento del sistema de frenos de vehículo por parte de usuarios y técnicos sin duda contribuirán a la Seguridad Vial, y ahorrarán costos de mantenimiento por cambio de componentes a lo largo del sistema de frenos del vehículo, y desde Brake Pak es nuestra responsabilidad desarrollar productos con especificación superiores a las exigidas en el Equipo Original y llevar esto al mercado para que sea aplicado en las buenas prácticas y correctas condiciones, no solo para el líquido de frenos sino para todo nuestro portafolio con productos cómo cilindros, bombas, pastillas, discos, hardware, entre otros, que se complementan con el uso de un líquido de frenos en buen estado.

Puedes comprar tu líquido de frenos en el siguiente enlace:

https://www.mercadofrenos.com/liquido-y-limpiador-de-frenos-5/p

Artículo de Gerencia Técnica de Producto,  Brake Pak